El peinado excesivo, la exposición al calor, los tintes químicos y otros hábitos pueden despojar al cabello de su humedad y de sus aceites naturales, causando daño, rotura y pérdida de vitalidad y brillo. Además, el cabello dañado puede ser el resultado de una afección médica como una deficiencia de vitaminas o un desequilibrio hormonal,...